El Gobierno cumplió sus responsabilidades aún con el impacto que tuvo la pandemia sobre las finanzas públicas

La pandemia por COVID-19 afectó la recolección de ingresos fiscales en todos los países donde la enfermedad exigió tomar medidas urgentes. El Salvador no fue la excepción y, a pesar de que el Gobierno recibió menos ingresos de los que se había programado, cumplió con las prioridades estatales.

En diciembre de 2020, el Ministerio de Hacienda (MH) reportó que los impuestos y las contribuciones especiales aportaron $4,821,3 millones como resultado de todo el año. En comparación con los ingresos que se había previsto tener, se trata de un faltante de $729.9 millones, es decir, 13.1 % menos.

Aún al enfrentar estas circunstancias, el Gobierno actuó con anticipación para proveer la mejor atención posible en salud a los salvadoreños y continuar con los gastos que son prioridad, como el bienestar de los hogares, el Plan Control Territorial, insumos para enfrentar el COVID-19, medicamentos, salarios de médicos y personal de primera línea, paquetes alimentarios y deuda externa.

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Otro desafío que el equipo del Presidente Bukele ha logrado superar es el bloqueo sistemático de los diputados unidos en el bloque de oposición, que llegaron a impedir el acceso de al menos $800 millones en recursos provenientes de préstamos otorgados al país para la emergencia y para inversión social. Este mismo grupo de diputados terminó el año usurpando las funciones de Hacienda con actos inconstitucionales y obstaculizando la mayor parte de los fondos.

También los contribuyentes se esforzaron por mantener sus cuentas limpias con el fisco. Hacienda registró que, a diciembre de 2020, el Impuesto Sobre la Renta (ISR) que se recolectó vía declaraciones dejó $522.5 millones, un incremento anual de 10.8 %. Es importante recordar que esta recolección corresponde a los ingresos percibidos durante 2019 por actividades laborales.

Las actividades como el turismo, entretenimiento, transporte y muchas industrias bajaron su ritmo de trabajo, cuando la nación se protegió de los contagios. De igual manera, bajó el consumo de hogares y el fisco perdió muchas de sus fuentes regulares de ingreso. Así sucedió en decenas de naciones.

En 2021, con el país en vías de recuperación, el Gobierno del Presidente Bukele sigue cubriendo todos sus compromisos y obligaciones. Con la tendencia que muestran la inversión y el consumo, más las actividades como el Plan Antievasión, la administración pública podría ampliar su margen de maniobra.