Agricultores reciben asesoría del Gobierno con uso de tecnología para mejorar los ingresos por sus cultivos

Los cultivos agrícolas tienen un papel importante para la generación de empleos y la seguridad alimentaria. El Presidente Nayib Bukele ha dispuesto que se dé un apoyo integral a los productores, para que impulsen el desarrollo en la zona rural.

 

El Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA) está trabajando en mejorar las prácticas para que las cosechas sean más rentables. “Desde el Laboratorio de Biotecnología, estamos produciendo plantas con la técnica in vitro (plátano de la variedad cuerno enano) de pureza genética y completamente sanas; además, trabajamos en la introducción de materiales de guineo de seda variedad coco para su comercialización”, destacó la institución.

 

Las frutas tienen un mercado donde se paga mejor por el producto. La diversificación es clave para ayudar a las familias agricultoras, pues les permite proveer alimentos y, al mismo tiempo, mejorar sus condiciones de vida.

 

El CENTA destacó que “a través de la técnica in vitro, las plantas producidas son cien por ciento sanas. Este proceso inicia con la selección de vástagos, cultivo de iniciación, introducción de yemas, multiplicación de brotes, aclimatación en vivero y plantación en campo”. En todo momento, los equipos del CENTA están pendientes de transferir conocimientos a los productores agropecuarios. Han sido las mismas familias quienes han solicitado que se introduzcan estas variedades para cultivar de la mejor manera.

 

Con apoyo de la cooperación de Corea, el CENTA ha profundizado en mejores prácticas posteriores a la cosecha de mango, por ejemplo. Esto permitirá que los frutos puedan conservarse en buen estado por más tiempo y puedan vender más. Estas acciones están diseñadas para ser sostenibles en el largo plazo, pues es un aprendizaje que ya queda entre las comunidades productoras.

 

Otro proyecto que será beneficioso es el cultivo de frijol vigna. En la estación experimental Santa Cruz Porrillo, de San Vicente, los equipos institucionales preparan esta semilla para entregarla a pequeños ganaderos, para que ellos mismos preparen la harina que comen sus animales de crianza.  Es un alimento de calidad y al mismo tiempo reducen sus costos.

Estos esfuerzos coinciden con el trabajo por mejorar los canales de comercialización, dar seguridad jurídica por los terrenos y parcelas, mantener seguros los sitios de producción con las bases rurales de la Policía Nacional Civil y la transformación completa en la Escuela Nacional de Agricultura.