Aumentó el número de unidades exportadoras durante 2021, en especial, en la categoría de pequeñas empresas

Los resultados del comercio exterior salvadoreño muestran importantes avances no solo por los ingresos generados, sino también por la participación de más actores para lograr este desempeño.

El Banco Central de Reserva (BCR) registró 2,544 empresas exportadoras al cierre de 2021, equivalente a un incremento de 8.3 % en comparación con 2020.  También hay un aumento sensible respecto de 2019, el año cuando todavía no había impactado el COVID-19 por completo.

Dentro de esta base de empresas, el total de unidades productivas que reporta hasta $10,000 en valor exportado al año incrementó un 14 % en comparación con 2020, la mayor variación entre las diferentes categorías. El Banco indicó además que dentro de los otros rangos, como en el de gran empresa, más empresas consiguieron dar el paso hacia la comercialización con otras naciones.

El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha implementado medidas de apoyo para que las empresas de todo tamaño desarrollen su potencial. El Ministerio de Economía (MINEC) ofrece diferentes herramientas para ampliar los conocimientos de mercado, buscar cómo aumentar la productividad o innovar y cómo adaptarse a las nuevas exigencias que impuso la pandemia. En tanto, la banca estatal tiene líneas de financiamiento en condiciones competitivas, para que las empresas encuentren un respaldo que les permita crecer.

Otras instituciones como el Ministerio de Hacienda, el Banco Central de Reserva y la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma trabajan coordinadas para facilitar los trámites, para que los exportadores encuentren el apoyo necesario para colocar sus bienes con una reducción de costos en el proceso.

Uno de los indicadores que confirma la solidez de la recuperación económica, impulsada por el acompañamiento del Gobierno, es el “top cuatro” de productos que mayores incrementos tuvieron en los ingresos por comercio exterior: componentes eléctricos subieron 74 %; suéteres, 69 %; camisetas, 31 %; envases y tapones plásticos, 25 %.

Estas actividades requieren la disponibilidad de trabajadores y el acceso a una variedad de insumos. En este sentido, la estrategia gubernamental para combatir la pandemia por COVID-19, el proceso de vacunación y las mejoras en seguridad pública contribuyen a estos resultados. Así es como la priorización de la vida y la salud son determinantes para el desarrollo económico.