La prueba Avanzo está programada a desarrollar entre el 14 al 17 de noviembre en todo el país

Unos 70,000 estudiantes de segundo año de bachillerato del sector público y privado se someterán este año a la prueba Avanzo. El examen se desarrollará bajo la modalidad virtual desde el 14 al 17 de noviembre. Sin embargo, para los estudiantes con discapacidad visual, los que están en Centros Penales y en otros casos especiales, se dispondrá de pruebas en físico para que ningún joven se quede sin someterse al examen.

 

El primer día se desarrollará el cuestionario del estado socioemocional, los demás días se harán los temas de Matemáticas, Estudios Sociales, Orientación Vocacional, Ciencias Naturales, Lenguaje y Literatura e Inglés. La prueba extraordinaria está programada para el 27 de enero.

 

La plataforma del sistema de evaluación que se pondrá a disposición para el examen estará habilitada desde las 8:00 de la mañana hasta las 2:00 de la tarde de cada día. Los estudiantes tienen hasta el 26 de octubre para poder inscribirse para efectuar la prueba.

 

Es importante mencionar que todos los estudiantes del sistema público podrán desarrollar la prueba con las laptops que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele les ha entregado. La ventaja que tendrán es que el estudiante podrá saber el resultado de la evaluación. Además, de que cuentan con un paquete de internet que también se les ha dado de forma gratuita.

 

“Nosotros en tiempo real estamos viendo cuántos de nuestros estudiantes las han terminado. En años anteriores teníamos la problemática que era virtual, pero nuestros niños a veces tenían que hacerla desde sus teléfonos o ir donde la abuela o donde la tía a que le prestaran un equipo para poderla hacer. Este año cada uno de ellos tiene sus equipos tecnológicos y la podrán tomar desde ahí”, apuntó el ministro de Educación, Mauricio Pineda.

 

En la nota total la prueba Avanzo tiene una ponderación del 5%, pero el Gobierno ha diseñado este examen no para castigar a los estudiantes, sino para saber hacia dónde orientar las mejoras educativas. Es por eso, que ahora además de medir lo cognitivo, se mide lo socioemocional y psicoemocional.

 

“Una vez que tengamos los resultados de la prueba, que esperamos sean satisfactorios, las instituciones educativas podrán reflexionar sobre la efectividad de sus planes pedagógicos a partir de los logros y fallos de sus estudiantes, esto es importante para nosotros”, resaltó el funcionario.