La tendencia reportada de contagios de COVID-19 todos los días lleva más de una semana a la baja

Desde el 10 de agosto pasado, la curva de contagios de COVID-19 describe una leve baja en los pacientes detectados por día. Contrario a lo que se esperaba posterior al periodo de las vacaciones, no hubo un incremento masivo de pacientes ingresados en el hospital con la enfermedad.

Los contagios superaron la línea de los 300 contagios por día, pero entre el 10 y el 18 de agosto la cifra ha descendido a los 281 casos confirmados.

El avance en el proceso de vacunación contra COVID-19 que tiene en vigor el Gobierno está arrojando los resultados esperados, para limitar la circulación del virus en el país y por ende los casos de contagio no pueden ser masivos.

Mientras más personas estén vacunadas con las dos dosis del fármaco, reduce la posibilidad que los contagios se multipliquen exponencialmente.

Además, la implementación del decreto legislativo 90, con el que se prohíbe la organización de conciertos, mítines, fiestas patronales y eventos deportivos exigiendo la presentación de la cartilla de vacunación con las dos dosis aplicadas, es un acierto en el control de la enfermedad.

En la medida que la población aplica las medidas sanitarias a cabalidad, se evitan los contagios y el virus pierde fuerza. De ahí la importancia, en que todos los sectores de la sociedad mantengan la guardia arriba en el combate del SARS-CoV-2.

Ningún otro país en Centroamérica ha alcanzado el nivel de vacunación de El Salvador, en seis meses de iniciado el Plan Nacional de Vacunación con más de 5.4 millones de vacunas aplicadas y con más de 2 millones de salvadoreños completamente vacunados, hay un posicionamiento indiscutible.

Este Gobierno lleva un año y ocho meses luchando contra el virus, utilizando los recursos disponibles para salvaguardar la vida de la mayoría de la población y se está cumpliendo el objetivo de avanzar lo más rápido en el proceso de vacunación de la población meta de 5.5 millones de personas.