Pandilleros desesperados buscan huir por diferentes medios de las autoridades de seguridad

Las tropas del Gobierno del Presidente Nayib Bukele que permanecen en diferentes zonas del país, están limpiando las comunidades que históricamente eran peligrosas por la incidencia de pandilleros terroristas. Los criminales intentan desesperadamente huir para no ser llevados ante la justicia y responder por los delitos que han cometido.

 

Los terroristas han sido sorprendidos escondidos dentro de pilas con agua, en el interior de muebles, en copas de árboles, en cuevas, en casas abandonadas y hasta en campamentos clandestinos en zonas boscosas del país.

 

Otros ocultan sus tatuajes de pandillas con otros artísticos y algunos desempeñándose como falsos pastores evangélicos o vigilantes.

 

El caso más reciente es el de un pandillero a quien se le acusa de homicida y otros delitos, que fue descubierto en el interior de un ataúd que era transportado sobre el techo de un vehículo tipo sedán en la carretera a Chalchuapa, en el departamento de Santa Ana.

 

La intención del terrorista era llegar a la frontera San Cristóbal y luego pasar a territorio de Guatemala. Este fue capturado y puesto a disposición de la justicia.

 

La Guerra contra las pandillas no se detiene y desde el 27 de marzo, a la fecha, se contabiliza la captura de 61,500 terroristas, entre estos 900 de sus principales cabecillas.

 

Las fuerzas de seguridad del Gobierno patrullan todo el territorio nacional en busca de los remanentes de los grupos criminales.

 

Los cercos de seguridad en el municipio de Soyapango y en las comunidades La Granjita y Tutunichapa 1, en San Salvador, han logrado extraer a más de mil pandilleros que intentaban ocultarse de las autoridades.

 

Las tropas y los contingentes policiales se mantienen en zonas que eran consideradas peligrosas para capturar a los terroristas que se esconden.

 

El resultado del Plan Control Territorial y el régimen de excepción encaminan al país a ser el más seguro del continente americano, con 276 días sin homicidios en lo que va de la gestión del Presidente Nayib Bukele, entre estos 7 días de enero.