Presidente Nayib Bukele ordena izar la bandera de El Salvador a media asta durante tres días en honor a policías que murieron heroicamente defendiendo a la población

Como una forma de honrar a los tres agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), asesinados por pandilleros terroristas en Santa Ana, el Presidente Nayib Bukele ordenó que las banderas de El Salvador sean izadas a media asta en todo el país.

“Se ordena que todas las banderas en nuestro país sean izadas a media asta por tres días, en honor a los tres héroes que dieron su vida el día de ayer, para proteger a los salvadoreños”, fue la orden del Presidente Nayib Bukele.

El martes en la noche, a minutos después del triple homicidio, el Jefe de Estado ordenó arreciar la Guerra contra las pandillas y capturar a los autores materiales e intelectuales del vil ataque.

Los equipos de la Policía y de la Fuerza Armada continúan con las operaciones en busca de los asesinos de los agentes y de los que los intenten ocultar.

Mientras continúan todas las acciones de seguridad bajo el régimen de excepción y el Plan Control Territorial para desarticular definitivamente a esos grupos terroristas.

“En cuanto a las medidas de seguridad en el país, esto (ataque del martes) no nos hará retroceder sino avanzar más, tenemos la capacidad de aumentar la fuerza que estamos aplicando contra las pandillas”, reiteró el Presidente Nayib Bukele.

El Jefe de Estado afirmó que el régimen de excepción ha sido vital para alcanzar múltiples resultados contra la criminalidad.

Una forma de arreciar la Guerra contra las pandillas es el refuerzo a la Fuerza Armada con más personal, nuevo armamento, cascos y chalecos para todos los miembros de la institución a fin de proteger la integridad de los militares y seguir apoyando las tareas de la Policía Nacional Civil para erradicar a los grupos terroristas.

En el mismo orden, la Asamblea Legislativa, durante la sesión plenaria ordinaria del martes, pasado, rindió un minuto de silencio en memoria de los tres policías asesinados en el cumplimiento de su deber de proteger a la población honrada.