Con una apuesta decidida hacia la niñez, el Gobierno y la Asamblea Legislativa se articulan y aprueban $100 millones para fortalecer las políticas de primera infancia
El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha recibido el respaldo de la Asamblea Legislativa al aprobar, con 64 votos a favor, una inversión de hasta $100 millones financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para implementar el Programa de Mejora de la Calidad y Cobertura Educativa: Nacer, Crecer, Aprender.
Como parte de la Política Nacional de Primera Infancia “Crecer Juntos”, liderada por el Despacho de la Primera Dama de la República, Gabriela de Bukele, se han planteado diferentes iniciativas a favor de la niñez y la primera infancia, las cuales, en la anterior legislatura no fueron abordadas por falta de voluntad, pero que ahora han sido bien recibidas por los legisladores y El Salvador está avanzando hacia el bienestar social de la población.
Los fondos aprobados contemplan $77 millones para la mejora de la calidad y expansión de la oferta de educación inicial y parvularia, $13.5 millones para las modalidades flexibles de educación secundaria y $1.5 millones para la transformación digital de la gestión educativa, con lo que se logrará mejorar la calidad y la oferta educativa inicial en parvularia.
El programa de Mejora de la Calidad y Cobertura Educativa será ejecutado por los Ministerios de Vivienda y Salud, que trabajarán articulados para asegurar que la niñez tenga acceso a una educación digna e integral.
Además de este programa, se están implementando dos más, siempre en beneficio de la primera infancia: uno es el programa de Desarrollo Integral de la Primera Infancia en El Salvador: Creciendo Saludables Juntos y el programa de Desarrollo Integral de la Primera Infancia en El Salvador: Crecer y Aprender Juntos, gracias a la confianza de organismos de cooperación en el Gobierno del Presidente Bukele.
Todo esto demuestra que hoy es una realidad la articulación Gobierno-Asamblea Legislativa en pro de los intereses de las mayorías y que atrás quedó la etapa de bloqueo, desinterés y apatía sobre estos temas, tan importantes para el presente de los niños como el futuro de su educación, salud y desarrollo.