El Hospital El Salvador no ha alcanzado el 100 % de su capacidad para atender a pacientes COVID-19: hay suficientes recursos sanitarios e insumos médicos

Los casos confirmados de COVID-19 se han incrementado en las últimas semanas a escala nacional, por lo que en el Hospital El Salvador son atendidos un aproximado de entre 600 a 700 pacientes. Pese a ello hay disponibilidad suficiente para continuar recibiendo personas que requieran la ayuda del equipo de profesionales.

La capacidad instalada en el Hospital El Salvador es para un poco más de 1,000 pacientes y en los espacios disponibles se incluye a las personas con un cuadro clínico grave y crítico.

A esta fecha están ingresados 466 pacientes con el pronóstico de estado grave y 127 crítico. Los equipos interdisciplinarios trabajan coordinadamente en el proceso de recuperación de las personas. No existe mayor satisfacción para el equipo médico y de apoyo poder ver curadas a las personas después de pasar por un episodio crítico de su vida.

Entre las acciones más recientes que las autoridades de Salud están implementando es la activación de toda la logística que estaba montada en los hospitales de la periferia, para atender pacientes COVID-19 a manera de anticiparse en el caso que siga aumentando la demanda de servicios.

El ministro de Salud, Francisco Alabi, es categórico en descartar que el sistema hospitalario público haya colapsado y, por el contrario, afirmó que se cuenta con espacios disponibles para dar cobertura a los pacientes, además de contar con medicamentos y con los aparatos médicos de alta tecnología para apoyar.

Una vez más, hay que enfatizar que no todas las personas a quienes se les confirma haber dado positivo al virus desarrollan síntomas, porque 8 de cada 10 no presentarán sintomatología de la enfermedad.

La principal estrategia contra el SARS-CoV-2 actualmente es la vacunación. Las dos dosis del fármaco no evitan el contagio, pero sí protegen un 100 % que la infección causada por el COVID-19 se desarrolle a las formas más complejas y cause una letalidad. La mayor parte de personas que fallecieron, posterior de habilitar la vacunación, no se habían vacunado y formaban parte de los grupos de riesgo.