El sistema hospitalario público tiene la capacidad instalada suficiente para atender el aumento de casos COVID-19
El promedio de pacientes ingresados en el Hospital El Salvador, a esta fecha, es de 450 y la capacidad instalada en el referido centro especializado es para más de 1,000 camas.
Por ello, a pesar del incremento de contagios por COVID-19 registrado en las últimas semanas, no ha sido superada la capacidad del sistema hospitalario público, lo que confirma la acertada decisión gubernamental de modernizar la red sanitaria nacional.
Este martes 13 de julio, fueron detectados 223 nuevos contagios del virus. Los casos proceden de diferentes partes del país y se descarta que haya un rebrote de la enfermedad en una zona en específico.
Del total de los pacientes diagnosticados con la enfermedad, el 80 % es asintomático, otro 15 % desarrolla síntomas entre leves a moderados y el 5 % requiere de asistencia médica especializada hospitalaria.
El decreto transitorio aprobado por la Asamblea Legislativa en la sesión plenaria de ayer, establece la prohibición del desarrollo de mítines, fiestas patronales, conciertos y eventos deportivos con la asistencia de público.
Las prohibiciones son una medida para limitar la transmisión del virus de persona a persona durante las aglomeraciones. Además, es obligatorio el uso de mascarilla en el resto de concentraciones de personas que no están establecidas en el referido decreto.
El ministro de Salud, Francisco Alabi, reiteró la necesidad de que los salvadoreños retomen la implementación de las medidas sanitarias de prevención para evitar los contagios, incluso, las personas que ya han sido vacunadas deben continuar poniendo en práctica todos los protocolos de bioseguridad.
El aumento de contagios que se tiene a esta fecha ha activado las alarmas de las autoridades, pero no ha llegado al desbordamiento como para la implementación de acciones de prevención sanitaria de mayor rigurosidad, similares a las de un año atrás, cuando se tenían picos de contagio por día de hasta 440 casos.
Los salvadoreños deben estar confiados que todas las acciones de prevención sanitaria que hace el Gobierno, en el control de la pandemia, son con el objetivo principal de salvaguardar la vida de la población.