En cuatro municipios del país registran un solo caso confirmado de COVID-19 desde el inicio de la pandemia
Los municipios San Antonio de la Cruz y San José Cancasque, de Chalatenango; así como en Sensembra y San Fernando, de Morazán, solo un caso confirmado de COVID-19 ha sido reportado, en cada lugar, durante un año de pandemia.
La estrategia sanitaria del Gobierno del Presidente Nayib Bukele abarca los 262 municipios. Los equipos de Salud llegan a cada rincón del país para promover las acciones preventivas que, hasta la fecha, han evitado el desbordamiento de las personas contagiadas.
Los municipios que reportan un solo caso de contagio no tienen características especiales en comparación con sus vecinos, esto significa que los residentes se han plegado disciplinadamente a los protocolos de bioseguridad para evitar los contagios.
Después de un año de pandemia, no hay ni un solo municipio del país donde las autoridades del Ministerio de Salud no hayan registrado casos de COVID-19, pero solo en los cuatro municipios, antes referidos, hay reportes de un contagio, esto denota las buenas prácticas preventivas.
A pesar de que la población que reside en estas zonas se traslada con frecuencia a otros municipios con mayor actividad comercial y, por ende, concentración de virus, se han protegido. El auto cuido, con la utilización de tapaboca, uso frecuente de alcohol en gel, el distanciamiento social, y otras, son de las medidas que ayudan a no contagiarse.
El Gobierno, a través del Equipo Interdisciplinario de Contención Epidemiológica (EICE) de El Salvador, desarrolla pruebas PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa, por sus siglas en inglés) para detectar a las personas contagiadas.
Con este examen, un hisopado nasal, de garganta o ambos, se diagnostica con un 99.99 % de efectividad la presencia del virus en el paciente.
Todos los días, incluso los fines de semana, el personal del EICE viaja a diferentes municipios para hacer las tomas PCR, esto ayuda a los expertos epidemiólogos a orientar las acciones preventivas para limitar la propagación del mortal virus.