Fideicomiso del agro es una apuesta del Gobierno del Presidente Nayib Bukele para beneficio de los productores
El Plan Maestro de Rescate Agropecuario avanza en su ejecución con los recursos disponibles, pero pronto será necesario acceder a más fondos para poder iniciar con el resto de proyectos. En este contexto, el Gobierno anunció que pronto presentará la propuesta de instrumento financiero que permitirá liberar recursos para miles de agricultores y productores pecuarios.
El titular del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), David Martínez, anunció que tienen previsto presentar, en un plazo de 15 días, el fideicomiso para proveer liquidez a las actividades agropecuarias. El anteproyecto se debe someter a consideración de la Asamblea Legislativa, para que los diputados inicien el proceso de formación de ley.
La cantidad con la que se tiene planificado poner el fideicomiso en marcha son $635 millones, de acuerdo con las estimaciones del MAG. Con este dinero, los productores accederán a créditos blandos, asistencia técnica y tecnología moderna.
“Hasta ahora no existían oportunidades en la zona rural. Por primera vez en la historia, para el Presidente Nayib Bukele la prioridad son ustedes, el activo más importante de El Salvador: los productores”, dijo el ministro Martínez.
El titular del MAG dio el anuncio del fideicomiso durante el acto para confirmar la transferencia de $1.2 millones a 34 organizaciones de productores agropecuarios que trabajan en las áreas por donde pasa el Corredor Seco.
La transferencia de fondos corresponde al programa Rural Adelante, que tiene como meta reducir la pobreza en 24 municipios de la zona oriental. Este año, el presupuesto previsto para este programa es de $4.5 millones.
En tanto, el MAG continúa con la entrega de los paquetes agrícolas de maíz y fertilizante. Este fin de semana iniciaron con las fases 2 y 3, es decir, con los agricultores que trabajan en las zonas central y paracentral.
La soberanía alimentaria y la renovación de la zona rural están entre las apuestas de Estado que el Presidente Bukele ordenó desarrollar desde el primer día de su mandato.