Fuerzas de seguridad en El Salvador han actuado con destacado profesionalismo para combatir a las pandillas en todo el territorio

Las estrategias de seguridad que dirige el Presidente Nayib Bukele ha creado las condiciones para que El Salvador tenga los tres años más seguros de su historia.  “La gente honrada al fin tiene tranquilidad”, comentó el Presidente Bukele.

Pero, además, estas acciones tienen otra particularidad: Son pocas las “bajas” o muertes de los delincuentes. La razón principal es que tanto los soldados como los policías a cargo de ejecutar los planes actúan con una pericia notable.

“Cuando vemos otros países, en este y en otros momentos, que han combatido a los terroristas y al crimen internacional que los acecha, dejan a su paso de este combate decenas de miles –o centenares de miles– de muertos”, anotó el Presidente Bukele.  Así ha ocurrido en diferentes épocas y regiones, a lo largo de los años.  “Han alegado que es por su seguridad”, observó el Mandatario.

Pero “El Salvador no.  La tasa de las bajas de los criminales es increíblemente baja”, insistió el jefe de Estado. Si bien hay alrededor de 58,000 capturados, pocos han fallecido en este contexto.

No solo eso: las fuerzas de seguridad han desmantelado campamentos, perseguido a los delincuentes en zonas agrestes, creado cercos –como el de Comasagua– y arrestado a reconocidos líderes pandilleriles.

“Aun así, han dejado desarticular a dos de las estructuras criminales terroristas más fuertes del continente, causándoles pocas bajas.  Eso habla del profesionalismo con el que se está luchando esta Guerra contra pandillas”, reafirmó el Presidente Bukele.

Sus palabras llegaron durante la presentación de 202 nuevos alumnos graduados de la Academia Nacional de Seguridad Pública.