Gobierno del Presidente Bukele consigue ahorro de $275 millones para el país con la operación para recomprar la deuda y anuncia una segunda oferta

La operación financiera que anunció el Presidente Nayib Bukele para recomprar la deuda con vencimiento en 2023 y 2025 ha concluido con éxito en esta primera fase.  Los resultados han ido en línea con lo esperado, porque los inversionistas dieron una respuesta positiva; pero, además de eso, el país pudo tener un ahorro significativo con estos compromisos.

“El Salvador ha finalizado con éxito la primera operación de compra anticipada de los bonos con vencimiento en el año 2023 y 2025; logrando recomprar bonos por más de $565 millones y generado un ahorro a nuestro país de más de $275 millones”, informó el Presidente Bukele.

Los gobiernos de ARENA y el FMLN colocaron paquetes de bonos salvadoreños –en distintos años– y programaron su vencimiento para 2023 y 2025.  Ocuparon deuda cara y solo tiraron el problema hacia adelante.

Pero el Presidente Bukele, para reducir el impacto de dichas obligaciones financieras en la economía, ejecutó una operación de recompra anticipada.  Es decir, el Estado preparó una oferta para tomar los bonos salvadoreños que tienen los inversionistas antes de la fecha de vencimiento y la reacción del mercado internacional fue favorable:  las autoridades pudieron confirmar que crece la confianza en El Salvador y su capacidad para pagar.

“Hemos recomprado más de la mitad (54 %) del bono de $800 millones de deuda externa emitida por el gobierno de Mauricio Funes, que toca pagar totalmente en 2025.  Y hemos iniciado a pagar el bono de $800 millones que emitió el gobierno de Francisco Flores (que toca pagar en 2023)”, detalló el Presidente Bukele.

Según los resultados de la recompra, el Gobierno salvadoreño utilizó $565.6 millones para esta primera maniobra. Los recursos provienen de diversas fuentes, como los derechos especiales de giro que facilitó el Fondo Monetario Internacional y un crédito del Banco Centroamericano de Integración Económica.

La diferencia es que las fuentes de financiamiento a las que acudió el Gobierno tienen mejores condiciones de pago y ayudan a que se pueda manejar la deuda pública con un más amplio margen de maniobra.

El rendimiento que ha tenido esta recompra genera condiciones para proceder con una segunda, para el mismo paquete de bonos. Será en ocho semanas.  “La operación fue tan exitosa, que hemos decidido lanzar otra oferta por el remanente de los bonos del 2023 y 2025.  ¡El Salvador paga sus deudas!” anunció el Presidente Bukele.