Honduras y Guatemala siguen a El Salvador con medidas de bioseguridad al eliminar obligatoriedad de mascarilla

El Salvador continúa marcando el paso en el combate de la pandemia y es un ejemplo a escala mundial, al haber eliminado la obligatoriedad del uso de la mascarilla, acción que ha sido replicada por las naciones hermanas de Guatemala y Honduras.

El Gobierno del Presidente Nayib Bukele se ha caracterizado por anticiparse en la toma de decisiones contra la pandemia: el cierre de aeropuertos, uso de mascarilla, vacunación, son algunas de las acciones que El Salvador adoptó antes que muchos países con el objetivo de limitar la transmisión masiva del SARS-CoV-2. 

Ante los exitosos resultados obtenidos en El Salvador con el manejo integral de la pandemia implementado por el Gobierno, las naciones vecinas han seguido la misma ruta para proteger a la población ante la amenaza del virus.    

En el caso de Guatemala, el ministro de Salud, Francisco Coma, anunció el pasado miércoles la relajación del uso de los tapabocas en lugares abiertos y en municipios considerados bajo alerta naranja o amarilla.

Con respecto al uso de la mascarilla, el funcionario dijo que “deberá seguirse utilizando en espacios abiertos y cerrados en los municipios que se encuentren en alerta roja, mientras que en los municipios que estén en alerta naranja o amarilla la mascarilla deberá ser utilizada solo en espacios cerrados”.

Coma aclaró que la desescalada de las medidas fue establecida en un acuerdo ministerial, que definió las características y condiciones que debían darse para regresar a la normalidad.

Mientras tanto en Honduras, los medios locales informaron que hasta esta semana algunos profesionales de la salud han comenzado a evaluar la posibilidad de limitar el uso obligatorio de los tapabocas, a raíz de que en algunos lugares ha disminuido el número diario de decesos a consecuencia de la enfermedad.

Sin embargo, aclaran que la cantidad de vacunados con dos dosis no llega ni al 50 %. Según los especialistas, para desistir del cubrebocas se debe alcanzar un 70 % de ciudadanos con el esquema de inmunización completo y revisar que la curva de contagios de mayo y junio tenga cifras óptimas y si todo marcha bien se podrá quitar la mascarilla en julio próximo.