La vacunación, seguir las medidas de bioseguridad y la tercera dosis causan la baja en los contagios de COVID-19
El Salvador está alcanzando el 70 % de la población vacunada contra la COVID-19, gracias a la amplia estrategia nacional de inmunización que mantiene en vigor el Gobierno del Presidente Nayib Bukele y que ha originado el descenso de los casos de contagio en las últimas semanas.
Hasta el 3 de noviembre se contabilizan 3,861,100 salvadoreños con dos dosis de la vacuna, 442,652 con tres dosis y 4,328,939 que ya cuentan con la primera dosis. A este grupo hay que sumar las 7,203 dosis administradas a extranjeros.
El avance en la vacunación más la implementación de las medidas de bioseguridad de parte de la población como la aplicación de alcohol en las manos y el correcto uso de la mascarilla, están demostrando ser las principales armas que se tienen para vencer al COVID-19.
“La disminución (de casos) se debe a la combinación de aplicar la tercera dosis, la estrategia de vacunación a todos los grupos etarios y seguir las normas de bioseguridad”, expresó el ministro de Salud, Francisco Alabi.
En el sistema hospitalario público están internados 856 pacientes COVID-19, la mayoría, (604) en condición grave y la otra parte (252) en estado crítico. Semanas atrás, este indicador alcanzaba los 1,200 pacientes.
En la medida que haya más personas vacunadas, el virus tenderá a ceder y, por ende, habrá menos personas contagiadas, internas en los hospitales y por supuesto que reducirán las letalidades.
De hecho, el 3 de noviembre las autoridades del Ministerio de Salud reportaron la muerte de 10 personas, otro de los indicadores que ha venido en descenso.
El aumento de contagios que se tuvo meses atrás está relacionado con el aparecimiento de las nuevas adaptaciones del virus que ingresaron al país como las variantes de preocupación Alfa, Beta y Gamma. En el caso de la Delta, los investigadores afirman que es la causante de los aumentos de casos en todo el mundo.