Legislativo retrasa aprobación de herramientas para evitar alza de fallecidos y contagios por COVID-19

Después de más de dos semanas de que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele presentó una nueva propuesta para cumplir una cuarentena estricta de 15 días, la Asamblea Legislativa continúa sin aprobar las herramientas legales para que el Ministerio de Salud y otras instituciones del Órgano Ejecutivo puedan frenar la curva de contagio del COVID-19, que solo en los primeros cuatro días de esta semana lleva un promedio de 279 nuevas infecciones.

La Comisión Política de la Asamblea dejó abierta su sesión desde el pasado viernes, bajo la premisa de llegar a un entendimiento para la aprobación de una cuarentena. Hasta hoy, siete días después, no se ha retomado la reunión ni el debate, un hecho que confirma la actitud pasiva por parte de los legisladores ante una situación de salud que afecta a todo el país y que requiere un abordaje de Estado.

“Necesitamos una intervención mayor, un régimen de excepción para hacer aislamiento y cuarentena porque el sistema de salud está a punto de colapsar, ya que un 58 % de los actuales casos son relacionados con la reapertura económica, que inició el 16 de junio”, dijo el ministro de Salud, Francisco Alabi.

Sin embargo, este planteamiento por parte de los diputados cambió, para luego solicitar una cuarentena focalizada en los municipios con más casos de COVID-19 y dar otras herramientas y recursos a las comunas, como en el caso del alcalde de Soyapango, Juan Pablo Álvarez, que llegó a pedir un régimen de excepción para 10 colonias del municipio.

En la sesión plenaria celebrada ayer, los diputados no hicieron ningún intento por debatir o aprobar una ley que le permita al Gobierno del Presidente Bukele aplanar al mínimo la curva de contagio, por lo que se le hace un llamado a este órgano de Estado a analizar la situación crítica de COVID-19 en el país y a legislar a favor de la vida de los salvadoreños.

El Gobierno anunció la semana pasada que diferiría por 15 días el inicio de la segunda fase de la reapertura económica, en vista de que en la primera etapa los casos de coronavirus se elevaron de forma considerable.